En pleno entorno competitivo, la confiabilidad del talento humano en las empresas contribuye con el cumplimiento de objetivos estratégicos. Gestionar el capital intelectual es un arte que también se desarrolla de forma integral. Aparte de la formación, la experiencia y la identidad corporativa, la productividad es un indicador ligado directamente al beneficio.
En este sentido, como garantes del patrimonio de una organización, es útil identificar fortalezas que contribuyan con un óptimo desempeño. La idea es obtener siempre resultados satisfactorios. De esta forma, la toma de decisiones se efectúa con bases, sin margen de error, frente al mejoramiento continuo.
Así, en torno a un sistema, algunos se preguntan ¿qué es la confiabilidad en recursos humanos? Podríamos definirla como aquella capacidad para cumplir una función. Sujetos a un concepto, y a un entorno, cada actividad se desarrolla en un tiempo definido. Vinculada con el desempeño, tiene que ver con la probabilidad de que un trabajador avance eficientemente en su rol.
Investigaciones
Con el propósito de analizar la confiabilidad del talento humano, las empresas evalúan a nivel cualitativo y cuantitativo. Es así como detectan errores y desviaciones que en determinado momento, ponen en riesgo la seguridad. Sin embargo, la calidad y la efectividad también son indicadores importantes. Si el informe sobre los trabajadores no es satisfactorio, se determinan las causas y se toman las acciones pertinentes.
En términos gerenciales, una empresa identifica acciones primarias y secundarias. En función de ello, es posible que haya fallas que pueden ser críticas o de rendimiento sub óptimo. También están los errores humanos, por omisión o por intervenciones que voluntarias o no, afectan negativamente a la organización. Las consecuencias van desde daños a la propiedad, al personal, interrupción de procesos hasta ejecuciones inadecuadas.
En el ámbito operacional, la confiabilidad forma parte de una filosofía de gestión, donde la mejora continua es fundamental. Por lo tanto, se emplea la tecnología y una serie de herramientas para el diagnóstico. La metodología facilita lo concerniente a la planeación y control.
Criterios
En efecto, la confiabilidad del capital humano se desarrolla teniendo en cuenta los siguientes criterios:
- Formación.
- Motivación.
- Comunicación.
- Sentido de pertenencia.
- Ergonomía.
- Plan de carrera del trabajador.
Y justamente, para garantizar el éxito del negocio, se mide de cerca el rendimiento en torno a la confiabilidad integral de los activos. Por ende, en el proceso productivo es crucial el índice de seguridad, la calidad de los productos, los costos operativos y los reclamos de los clientes. Aunado a ello, el estudio incluye –si aplica- la afectación del ambiente y el número de errores humanos.
Otros componentes del sistema, tienen que ver con la actuación de proveedores, los insumos, la complejidad de los procesos y las instalaciones. Igualmente, los clientes y los productos contribuyen con la confiabilidad en la organización. Vale acotar que desde el enfoque físico, se verifica la integralidad de los sistemas de seguridad y se practican auditorías. Los informes, además, permiten precisar costos, evaluar inversiones y mitigar consecuencias.
Selección de personal
La confiabilidad humana es la base de toda relación empresarial. Por eso, es un factor que influye en la cultura organizacional. Aunque usualmente este concepto se asocia con el uso de tecnología, operaciones y procesos, el talento humano es quien ejecuta y genera resultados.
Para todo directivo, es imprescindible contar con personal de confianza. No basta sólo con cumplir un horario o seguir instrucciones inherentes al cargo. Un líder requiere personas que estén en sintonía con las metas y los objetivos de su empresa. Sólo así se desarrolla el sentido de pertenencia, el compromiso y la responsabilidad. Estos valores hacen que un negocio sea sostenible.
Por tal razón, la selección de personal va ligada a una estrategia. La decisión será acertada en la medida que se apliquen una serie de técnicas para identificar actitudes potenciales. Así se reducen los riesgos frente a situaciones que evidencian vulnerabilidad. En la actualidad, el hurto es la principal amenaza, debido a las pérdidas económicas que ocasiona. Otras prácticas inadecuadas tienen que ver con la fuga de información, en especial porque casi siempre pasan desapercibidas.
Cómo abordar fugas de información
La filtración de información confidencial en una empresa es un problema recurrente, considerando que los datos también figuran como activos. Más allá del impacto monetario o de las acciones legales que acarrean multas (por inconsistencias en la protección de la data), lo que está en juego es la reputación.
Cuando la imagen corporativa se debilita, se pierden los clientes y el esfuerzo de la compañía por mantener su prestigio. El hecho de manejar tecnología y un amplio flujo informativo, cuyo almacenamiento se efectúa en la nube, facilita la intrusión. A su vez, el uso de dispositivos móviles personales para efectos de trabajo, desencadena serios fallos de seguridad.
Aunque a veces las filtraciones ocurren accidentalmente (por descuido), otras tantas son intencionales. Se han visto casos en que algún trabajador malintencionado, propicia los ataques. Incluso, ya hemos abordado las técnicas de ingeniería social que facilitan estos incidentes. Cuando una empresa tiene claro el valor y el tipo de información que debe resguardar, frente al impacto de un robo, es prudente:
- Realizar la clasificación de acuerdo a su criticidad, bajo un contexto sólido y racional.
- Establecer un grado se seguridad, sujeto a una escala de riesgos.
- Determinar si los datos pueden alterarse sin autorización.
- Controlar el uso de dispositivos externos de almacenamiento.
- Reforzar las medidas de seguridad, accionando según el caso.
Con relación al personal, es recomendable aplicar técnicas para detectar las fugas de información. Instalar soluciones de prevención y cortafuegos es útil, mientras se actualizan las aplicaciones del sistema. Sin embargo, se puede proceder con el cifrado de la información corporativa, de carácter confidencial.
Confiabilidad del talento humano y estrategias de gestión
Finalmente, el desarrollo de una política de seguridad destinada a combatir malas prácticas en los puestos de trabajo es primordial. Al mismo tiempo, el protocolo incluye la firma de acuerdos de confidencialidad, entre proveedores y usuarios. Esto permite regular el entorno y aplicar las sanciones correspondientes por incumplimiento.
En resumen, la compañía Cisco Systems, Inc. (2008), fue lo suficientemente explícita al afirmar que “la mejor tecnología de seguridad del mundo no producirá un buen retorno de inversión si no se cuenta con una sólida base de procesos, políticas y educación en materia de seguridad. Las empresas deben comenzar por evaluar la conducta de los empleados y los riesgos asociados basándose en factores tales como el país y el panorama de amenazas”.
¿Cómo realizar entrevistas de confiabilidad y detección de fraudes?
A continuación, presentamos un clip sobre confiabilidad del recurso humano, difundido por el canal digital RHTV.
Fuentes consultadas
– Cisco Systems, Inc. (2008). Fuga de datos a nivel mundial: Riesgos y errores comunes de los empleados. Informe técnico. Disponible en: https://www.cisco.com/web/offer/em/pdfs_innovators/LATAM/data_mist_sp.pdf
